La distinción y su exclusivo diseño dan vida a espacios con carácter, donde se vive la tranquilidad de la casa antigua y el confort del hotel moderno.
Hotel Pucará es un establecimiento para la prestación de servicios de hotelería, iniciando sus actividades abril de 1977, y ha sido la realización de un sueño de su propietario, Sr. Abraham Abel Rabinovich Liz, que lo ha hecho realidad entonces como una empresa unipersonal.
Hotel Pucará es una combinación entre el savoir faire francés y la tradición argentina, con ambientes exquisitamente decorados, y aromas delicados que despiertan los sentidos invitando al huésped a disfrutar.
Cada rincón de Pucará Hotel combina minimalismo con elementos nobles y poco convencionales. La arquitectura del siglo XX se fusiona con detalles de vanguardia, creando ambientes cálidos y confortables.
Hotel Pucará debe su nombre al homenaje de su fundador, a su tierra de adopción y a sus hijos, primeros pobladores a quienes hoy llamamos indígenas, pero que nos dieron una etnia fuerte, valerosa, acostumbrada al trabajo duro, en cuyos genes se ha plasmado nuestra riqueza cultural. El vocablo “pucará” (fortalezas de piedra) nos remonta a nuestras raíces ancestrales, a los aborígenes calchaquíes, quienes lucharon en la impiedad de la conquista en defensa de su hábitat y que hoy constituyen verdaderos tesoros arqueológicos para nuestros visitantes.
Su fundador, fue sin duda alguna un emprendedor, que vivió y murió sin renunciar jamás a sus sueños. Adoptó a Catamarca como a su tierra prometida y se entregó a ella trabajando con inusitado tesón y desarrolló aquí, con entusiasmo, voluntad, valentía, perseverancia y no exento de fracasos –que lo fortalecieron pero no lo derrotaron-, muchos e innovadores proyectos de inversión, entre ellos, fue el primero que con fe inquebrantable en Catamarca trajo aquí a la Coca Cola, instaló y desarrolló la primera planta procesadora y distribuidora de gas envasado, el primer emprendimiento vitivinícola el sistema de comunicación a través de Telecentro y prestó el primer servicio en Catamarca de video cable, emprendimientos estos, que en su momento fueron emblemas para el crecimiento y desarrollo de Catamarca desde el sector privado, a la que amó con un ferviente sentido de pertenencia.